Celebrando el papel esencial de quienes cuidan de nuestra salud
Celebrando el papel esencial de quienes cuidan de nuestra salud
Cada 23 de octubre, México conmemora el Día de la Médica y del Médico, una fecha destinada a reconocer la dedicación, el conocimiento y el compromiso ético de quienes ejercen la medicina.
Origen y significado histórico
La elección de esta fecha tiene sus raíces en 1833, cuando se inauguró el Establecimiento de Ciencias Médicas, antecedente directo de la actual Facultad de Medicina de la UNAM.
Más de un siglo después, en 1937, durante una convención de los Sindicatos Médicos Confederados de la República Mexicana, se estableció oficialmente el 23 de octubre como el día para celebrar a las y los médicos del país.
En años recientes, esta conmemoración fue reconocida de manera formal a nivel nacional mediante decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación, reafirmando su carácter institucional.
El rol del médico en la actualidad
Hoy en día, el sistema público mexicano cuenta con más de 114 mil médicas y médicos, entre generales, especialistas y en formación. Cada jornada, las instituciones de salud del país brindan más de un millón de consultas externas, además de miles de urgencias, hospitalizaciones, cirugías y nacimientos.
El trabajo médico va mucho más allá del consultorio: también abarca la investigación científica, la vigilancia epidemiológica y los programas de salud comunitaria. En cada rincón del país, las y los médicos contribuyen a mejorar la calidad de vida de la población, ya sea en hospitales urbanos o en comunidades rurales.
Reflexión y reconocimiento
El Día de la Médica y el Médico no es solo una celebración, sino también una oportunidad para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta esta profesión en México. Las exigencias científicas, las condiciones laborales y el profundo compromiso humano que exige la medicina son razones suficientes para rendir homenaje a quienes dedican su vida al bienestar de los demás.
Hoy, más que nunca, esta fecha nos invita a agradecer, valorar y reconocer el esfuerzo de quienes cuidan nuestra salud y a seguir construyendo un sistema de atención más fuerte, justo y humano para todos.
